Es normal que extrañes su presencia, pero eres mucho más fuerte, lo sabes; abre los ojos, mira al frente, hacia delante. Deja tu pasado fuera, ya has sufrido bastante. No se merece tus lagrimas, ni mucho menos que que pienses en esa persona. Ha perdido algo realmente importante, algo que valía muchísimo la pena, y ese algo eres tu. Valorate, vales más que cien millones de los que son como el. No pierdas el tiempo, sonríe, mírate, eres increíble, preciosa. Levanta tu cabeza, bien alta. Tu no tuviste la culpa, tu diste lo mejor de ti. Tienes que estar orgullosa de ti. Vales la pena.